Sin darme cuenta y por los
periodos largos de no escribir, por diversas circunstancias, cumplimos un año
haciendo este blog, su servidor en la medida de lo posible ha mantenido la
constancia del mismo, un pequeño esfuerzo por hablar desde la perspectiva masculina
de la crianza de nuestros hijos y como me envuelvo en la educación y día a día
con mi hijo. Comencé buscando
información sobre el papel de los padres durante y después del embarazo de sus
parejas, paternidad responsable y textos que me ayudaran a comprender cada
situación, en fin una pequeña investigación personal de lo que tenía frente a mí
y estaba a punto de experimentar; encontré un par de artículos de contenido
corto y muchos donde los papás somos el papel secundario o terciario de este importante
tema en la vida de las personas, esto me dejó pensando mucho tiempo que no
existe y no hay muchos a quienes les interese tomar nuestro punto de vista,
solo se habla mucho de paternidad responsable y apoyo económico, yo sé que hay
una etiqueta para los papás de que somos proveedores, el lado fuerte de la
familia, la roca y la cabeza, yo por el contrario encuentro importante que
seamos guía y muy activos en cada paso de las vidas de nuestros pequeños, el
trabajo muchas veces nos absorbe porque nos buscamos estabilidad económica para
tener un buen nivel de vida, o es lo que yo pienso que la sociedad moderna nos
está haciendo creer. Afortunadamente en mi país (México) la familia aún está
valorada, sí, se ha minado el valor que tiene pero en base es fundamental aún,
por lo que a pesar del ritmo de vida impuesto por esta sociedad y de los falsos
valores de hoy en día, como el tener posesiones ostentosas y caras o presumir
una vida desinhibida y desenfadad o éticamente desfachatada, la familia
latinoamericana es aún el núcleo social.
Se me hace triste pensar que
tendré que explicarle a mi hijo porque hay seres humanos que prefieren sentirse
“bien” inhalando o inyectándose drogas , que disfrutando la vida con su gente y
haciendo lo que les gusta, conozco también la injusticia social que hay, los cotos de poder que no tienen piedad de
nadie y solo buscan hinchar sus bolsillos, la carencia y la guerra, todo eso es
como padre un verdadero reto para educar a mi hijo, enseñarle respeto, humildad,
compasión y auto confianza no será nada fácil en un mundo carente de estos
valores, lo único que puedo hacer es platicarle que hay personas que aún
creemos en el bien común, en la compasión, en el diálogo en ser buenos vecinos
y en respetar al prójimo, decirle que hice este blog para hacerles llegar a
otro papás el mensaje de que como varones tenemos la obligación de estar con nuestros hijos,
de guiarlos y amarlos a la par de su mamá, que la naturaleza no nos dio la
oportunidad de cargarlos en nuestros cuerpos, pero que la mitad de su espíritu
nació en nuestro corazón y de igual manera somos seres humanos que sentimos,
amamos y lloramos, no importa el género, que tiene derecho de equivocarse pero
que estoy seguro que se recompondrá y saldrá adelante porque creo en él.
Cuando crezca sabré que he
sembrado buenos valores en él y que depende de él ponerlos en práctica y
usarlos de buena manera en la vida, sabré si reconocerá el bien del mal y que
los extremos son malos, que ser hombre no es malo, a pesar de lo que digan las “feministas”
modernas, lo que está mal es el machismo,
le haré saber que estoy orgulloso de él sin importar que haga porque lo
amo, lo dejaré volar para que pruebe cada cosa de la vida a su manera y si
tiene oportunidad de hacer su familia, pase las enseñanzas que ganará y los
consejos de su viejo.
Sí, estoy bastante sentimental
porque este proyecto me ha dado la satisfacción de verme un tanto desde afuera
como padre, de evaluarme como pareja y de buscar ser un mejor ser humano, por
lo pronto he decidido darle un pequeño cambio de imagen a este espacio y seguir
desarrollándolo para crecer porque aunque muchos o pocos tomen lectura del
mismo, ya está ayudando a un pequeño grupo de personas: Mi Familia.
Gracias a todos aquellos seguidores
y lectores por estar aquí y por seguir las aventuras de este papá que lucha
todos los días por construir un gran padre para su hijo, nos leemos pronto.
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