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Cuando muere una mascota




Amigos bienvenidos a este su blog de confianza y hoy trataré un tema que todo papá tenemos que afrontar tarde que temprano: la muerte de una mascota.

Es imposible que un niño no se encariñe con su perro, gato, hámster, perico, pájaro, camaleón, etc. Las mascotas son algo que los niños buscan casi sin excepción y si como yo, eres de los que crecieron con mascotas, especialmente perros, mucho más.

Las mascotas nos ayudan a que los niños conozcan la responsabilidad y nos ayuden a educarlos con respecto al respeto, cuidado y obligaciones que tener una mascota conlleva.

Esta semana perdí a mi perrita Bóxer “Lola” ella vivía aun con mis padres y nos duró bastante tiempo. La rescatamos de un hogar donde no solo no recibía atención si no que estaba desnutrida y descuidad al grado que ni siquiera sabía comer de un plato, la tomamos a los 5 meses de edad y se quedó con nosotros hasta el fin de sus días, muchos años que nos regaló su alegría, ocurrencias y compañía, tuvimos suerte de poderle ofrecer una muy buena vida y de tenerla en las nuestras, hablo en general porque mis padres y mis hermanas también han sufrido por su partida, ya que la disfrutamos antes de tomar nuestros caminos y formar nuestras familias. Tuvo la suerte de conocer a nuestros hijos y en especial al mío, que por ser el mayor, la conoció y disfruto 3 años de su vida.

La conoció como “la viejita” le enseñamos a tratarla con cuidado pues ya no caminaba rápido, a hacerle cariños y como ama ayudarle a su abuela a darles de comer a los perros pues le llevaba hasta donde estuviera su plato para que no se moviera la perrita.  Antier mi hermana, que es veterinaria, nos dio la noticia de que no había más que hacer y lo mejor para que no sufriera de dolor, ya que tenía muchos tumores, era dormirla, la decisión más difícil de hacer si alguna vez has tenido un perro.

El caso es que la familia está muy triste por la muerte de la perrita, mi hijo con 3 años aún no dimensiona lo que es la muerte en sí, nunca se lo hemos ocultado, ya que con un poco más de un año tuvo que afrontar la muerte de su abuelo materno, cosa que tuvimos que aprender a explicarle, pero no ocultarle, que ya no podría ver a su abuelo.

Así que lo se lo hice saber diciéndole que ya no podrá volver a ver a “Lola” y que su abuelita estaba muy triste porque como "Lola"  estaba enfermita se había ido al cielo, le tomó un minuto  asimilarlo, su respuesta fue “Lola es muy linda, pobrecita” y siguió con lo que estaba haciendo, pero después, tan listos como son los niños, notó mi estado de ánimo y me volvió a preguntar por la perrita y fueron unos “porqués” bastante difíciles de responder, debido a mi estado y a que él está en la etapa de preguntar todo sin saber si es prudente o no. Con mucha paciencia le traté de explicar que todos tenemos que ir “al cielo” alguna vez pero que cuando los perritos se enferman o se hacen viejitos se van y no podemos volver a verlos, los extrañamos mucho y como ya no podemos jugar con ellos y hacerles cariños lloramos porque ya no están, pero no podemos seguir tristes y tenemos que seguir y conocer nuevos perritos. El niño con toda curiosidad escuchó mis explicaciones y solo asintió con la cabeza y se fue; 20 minutos después regresó y me dijo “papá dibuja a Lola” lo cual me sacó algunas lágrimas y le dije que sí que lo iba a hacer.

Así terminé haciendo un dibujo de la perrita que se fue al cielo, lo cual para mi representó una catarsis y a mi hijo le encantó, le ayudo a entender que ya no verá a su perrita  y que se ha ido y tiene que darle cariño a su abuelita porque está muy triste.



La muerte es un concepto muy difícil de explicar para nosotros como padres, pero debe ser parte de la educación de los niños porque a lo largo de su vida se toparan con ella y como parte de la vida misma tendrán que lidiar con el sentimiento de pérdida y tristeza, por lo que, aunque intentemos protegerlos y alejarlos de ello, los violentos tiempos en los que vivimos les darán amargas sorpresas, mejor ser honestos con ellos y prepararlos, si los humanos mueren, las mascotas también y es una oportunidad de educarlos  por más difícil que parezca.

Como ejemplo de mi experiencia, la película de Grande héroes de Disney, tiene una perdida familiar (como todas las películas de Disney) y donde se representa la muerte como un sentimiento superable y que puede ser utilizado como impulso de progreso y estímulo positivo. Mi enano comprende que “tadashi” hermano del protagonista muere en una explosión y ya no aparece más, solo en los recuerdos de su hermano y presentado por Baymax el robot que construyó, gracias a esta película nos fue más sencillo explicarle la partida de su abuelo.

Espero mi que experiencia les ayuden un poco a pensar en cómo explicarle a sus hijos, dado el momento, la muerte de sus mascotas.

Gracias por estar y nos leemos pronto.

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