Amigos la navidad; los adultos normalmente vamos amargándonos con el tiempo y deja de ser una época que independientemente del credo personal es un buen momento para estar en familia y disfrutarla. Yo en particular disfruté mucho la navidad en mi infancia, no solo por los regalos, también por las vacaciones, ver a mis primos, viajar, jugar en lugares hermosos y sobre todo ver a mis abuelos. Por ello hoy doy gracias al creador por poderle dar a mi hijo esta oportunidad también, pero tengo que reconocer que antes de conocer a mi esposa, las navidades las padecía, lejos de mi pareja, tener que dividirme, ver que se gasta excesivamente, comprar regalos para todos es imposible, etc. Como adulto la navidad va tomando forma como una situación de saturación de gastos y cosas materiales, vemos que tenemos que ahorrar para darle algo a todo mundo y créanme que de todas formas quedas mal con alguien, eso de entrar a todos los intercambios a los que te invitan, en el trabajo, amigos,